Comparar un acto idiota o absurdo con el comportamiento de un niño es tan habitual como injusto. La estupidez más que nacer con ella se desarrolla con el tiempo, por tanto, se da mayoritariamente en adultos
Una mujer, al salir de su lugar de trabajo, le decía a otra “¡son como niños!”, “¡o peores!” respondió esta última. Tan sólo es una muestra de la falta de respeto que las personas adultas tienen sobre las personas menores de edad.
El maltrato infantil está muy extendido y muchas personas no lo consideran como tal, sino, más bien, como una bofetada a tiempo. En otras ocasiones no son golpes sino palabras las que dañan al menor. Para detectar si estamos maltratando verbalmente a un niño o niña propongo lo siguiente: cambia la palabra “niño” por “adulto”, “hombre” o “mujer”. Veamos algunos ejemplos:
- ¡Vaya niño más caprichoso! vs. ¡Vaya adulto más caprichoso!. Todas las personas tenemos nuestros caprichos, independientemente de la edad.
- “La niña no obedece” vs. “la mujer no obedece”. Obedecer es una actitud sumisa ante un acto autoritario, prueba a dialogar, ya sea con la niña o la mujer.
- Si su hijo hace algo que no le gusta y le da una bofetada pregúntese si su madre o padre hubiese actuado como su hijo le hubiera golpeado. De ser “no” la respuesta significa que ha abusado de su posición de superioridad con su hijo.
Los niños son personas y, a menudo, personas indefensas. Tratémoslas con respeto.
Acerca de Cecilio Sánchez «Cean»Dicen que hago periodismo y que soy activista social. Retransmito en directo luchas sociales en
Periscope, denuncio injusticias y defiendo diariamente los Derechos Humanos. Desde Murcia (España) para todo el mundo y las 24 horas del día en
ceciliocean.es.
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Si trataramos a los niños como personas que son, intentaramos darle el respeto que merecen, comprenderlos, escucharlos, darles cariño, motivarlos a aprender, dedicarles el mayor tiempo posible todo ello, es un trabajo de las personas adultas. Las personas adultas hemos de tratar a los niños como personas, que es lo que son.
No hay que olvidar que los niños son eso, niños. No esperemos que se comporten como nosotros.
A veces intentamos crear adultos de menos de 10 años. Hay que comprender que el mundo de un niño y sus preosupaciones no tienen nada que ver con las de un adulto.
Que bueno esto de cambiar las palabras. lo que pasa es que claro, un adulto no se espera que sea caprichoso, simplemente tiene unos gustos, que ha ido perfilando con el tiempo, cultivándolos y claro, pues no parece que sus gustos sean algo arbitrario.
Aurelia, también a veces oigo frases del tipo “en algunos momentos se pone el niño tan insoportable que no me queda más remedio que pegarle”. Si esto mismo lo hiciésemos con personas adultas estaríamos todo el día golpeándos los unos a los otros. Esto da para un artículo que, por cierto, está aún por finalizar ;-)
Respeto si pero lo primero que tenemos que enseñar a un niño es a respetar, un niño de un año y algo que empieza a andar y cogerlo todo se le tiene que enseñar a obedecer las cosas que se tocan y las que no, lo normal es que con que tu se lo digas con cierta autoridad ya se queden quietos pero si prueban a ver que pasa si no te hacen caso y tocan lo que tu le estas diciendo que no, pues ahí viene la guantada, porque el niño tiene que aprender donde esta la autoridad eso es fundamental el niño no puede hacer lo que quiere si no lo que debe y eso es educación, claro a no confundir autoridad con autoritarismo. Por mi experiencia a un niño hay que pegarle muy poco solo en su momento y el niño no lo olvidara nunca, el niño tiene que aprender a controlar sus impulsos y para eso estamos los padres. Los primeros años de la vida son fundamentales para que el niño coja todos estos conceptos de su yo y los demas. No dejar pasar en su momento un intento de rabieta atajara que el niño coja ese camino para conseguir lo que quiere.
Anastasia, no estoy de acuerdo con pegar a un niño para que aprenda a obedecer. Así el niño no aprende a saber que está bien y que está mal, sólo aprende que tras hacer ciertas cosas recibe una bofetada, pero no lo asocia con un buen o mal comportamiento. Esto genera mucha incertidumbre en el niño ya que temerá a hacer algo nuevo, pues desconoce si recibirá o no una bofetada. Finalmente, estas bofetadas aumenta la probabiliad a que un futuro cuando sea adulto se muestre inseguro en muchas situaciones y sienta temor a decicir.
Seamos sinceros, se pega a un niño porque él está en una situación clara de inferioridad. No dudo que algunos comportamiento suyos puedan sacarnos de quizio, pero eso también nos sucede con personas adultas (familia, pareja, amistades,compañeros de estudio o trabajo, etc) y no por eso nos pegamos los unos a los otros.
Por otra parte, es habitual eschuchae que los niños son crueles, no es cierto. Aprenden que el fuerte gana al débil a partir de las bofetadas físicas o verbales que reciben en su casa y luego se comportan así con aquellos que en su colegio son más débiles.
Anastasia, comprendo que no nos enseñan a ser padre o madre, pero es importante buscar alternativas a las bofetadas. Generaciones anteriores no tenían accesible la información como la tenemos nosotros a día de hoy y eso explica las conductas violentas de los mismos.
Gracias de nuevo por tu opinión, también es importante ser capaz de saber reconocer cuando estamos de acuerdo en que no lo estamos, ¿me explico?. Si quieres que tratemos el tema, yo encantado.
Saludos.
Anastasia dice “no confundir autoridad con autoritarismo”. Exactamente. Cuando los adultos “nos portamos mal”, no consentimos que se confunda autoridad con autoritarismo. Si yo aparcase mi coche en un paso de cebra, me estaría portando mal, estaría haciendo algo que “no se debe hacer”, y yo lo sé, a mí me han “enseñado” que no se debe aparcar en un paso de cebra. Un policia, persona con autoridad para ello, me puede poner una multa. Pero en
ningún caso me puede dar una bofetada, eso sería autoritarismo.
Siguiendo la línea de Cean, cambio un poco las palabras en el texto de Anastasia:
“Por mi experiencia a Laura hay que pegarle muy poco solo en su momento y Laura no lo olvidara nunca, Laura tiene que aprender a controlar sus impulsos….. No dejar pasar en su momento un intento de rabieta atajara que Laura coja ese camino para conseguir lo que quiere.”
Si Laura es mi hija de 21 meses, a muchas personas esta afirmación no les extrañaría. Si en cambio digo que Laura tiene 32 años, es mi pareja, la persona con la que convivo, la cosa cambia bastante ¿verdad?.
Pero es que puede ser que Laura se niegue a cenar, o no quiera irse a la cama todavía a pesar de tener que madrugar, o no quiera recoger la habitación porque alegue que está cansada y no le apetece… ¿Es lícito en este caso que yo pegue a Laura si tiene 21 meses? ¿y si tiene 32 años?
Estoy totalmente de acuerdo con Cean. Generaciones pasadas no tenían la información que tenemos hoy en día, pero nosotros tenemos además libertad de criterio. No nos anclemos en conceptos arraigados en nuestra cultura por la fuerza de la costumbre.
A casi todas las personas de mi generacion nos han pegado en algún momento, y todos los días nos encontramos con personas adultas que parecen no tener muy claro lo que hay que hacer, y como hay que hacerlo (personas irrespetuosas, intolerantes, maltratadoras físicas y psicológicas, racistas, egoístas….) Por tanto, me parece que la “bofetada a tiempo” no funciona tan bien como la pintan.
Saludos a todos!
Como bien dices Mónica no se debe abusar de la autoridad. Me gusto tu ejemplo.
También debo agradecer a Anastasia su sinceridad y su predisposición al diálogo, otras presonas son hipócritas y se muestras partidarias de no usar la violencia y luego maltratan a sus hijos.
Espero tu comentario, Anastasia.
¡Saludos para ambas!
Me parece a mi que estamos confundiendo las cosas, dar un azote en un momento dado no es un metodo de educación es un recurso, cuando un recurso puntual se convierte en un metodo ahí esta el problema,siguiendo con los ejemplos, les he preguntado a mis hijas ¿hos he pegado?: una me dice a mi un poco de pequeña la otra me dice a mi no, que significa eso cada persona es un mundo y como el metodo de la violencia no es mi metodo una sencillamente no tuve la necesidad. Y a no confundir cuando un niño hace una cosa mal a cuando no quiere irse a dormir, primero para que los niños hagan bien una actividad vital hay que acostumbrarlos desde que nacen, dormir es un acto natural y debe de ser hecho con alegria y naturalidad por el niño, jamas he tenido problemas con eso, mi metodo fue, se acostaban cuando se ponia el sol y se leventaban sobre las ocho de la mañana asi todosssssssss los dias, ellas se han ido tan felices siempre a la cama esas cosas no son problema si se les acostumbran desde pequeños. Asi que tenemos una primera diferenciación lo que es un acto biologico a lo que debe ser una conducta social, si un niño esta bien acostumbrado desde que nace(y no tiene problemas fisilolgicos), las actos naturales los van a hacer asi de una forma natural sin ninguana violencia, serian comer, dormir….
El otro aspecto seria las normas sociales de comportamiento donde entra: esta es mi propiedad y esta es la tuya, tu no puedes hacer burla a tu hermana porque es una falta de respeto etc. En estos aspectos diriamos sociales es donde la autoridad es la que educa y a los padres nos toca esta responsabilidad. Ad por cierto Cean la que ha recibido algunos azotes es una mujer super feliz (siempre lo ha sido) y lucida como ella sola además de que me adora y yo a ella claro.Anastasia, el azote es un recurso pero hay otros muchos. Es cierto que algunos padres lo utilizan como método y eso es muy peligroso.
Ya he modificado en mi comentario “provocan” por “aumenta la probabilidad”. No siempre una persona que recibiese azotes u otro tipo de violencia es en el futuro una mala persona o se muestra débil. Y tambien es cierto que Que tu hija no tuviese consecuencias negativas tampoco significa que en el resto de personas tampoco las tenga.
Saludos.
Efectivamente, hay recursos y recursos…
Pongamos por caso que en una reunión de trabajo, en la que surge una discusión, en algún momento yo le hago burla o le falto al respeto a una compañera, por seguir el ejemplo expuesto arriba. La persona con autoridad, en este caso mi jefe, en ningún caso podría darme una bofetada. Podría enviarme a casa dos días, suspenderme de empleo y sueldo por unos días, tener unas palabras conmigo por mi comportamiento… pero nunca darme una bofetada. Mi jefe no es una persona que pegue a sus empleados como método para que trabajemos y también nos respetemos, la bofetada sería un recurso puntual… pero no podría dármela. Pues con los niños sucede lo mismo, hay otros recursos al de la bofetada… exigen quizá mas esfuerzo por nuestra parte, y quizá también más tiempo… nadie dijo que educar a nuestros hijos fuera fácil. La bofetada es el recurso fácil, el que se entiende enseguida. Tú tienes la fuerza, yo debo someterme.
Pongamos por caso que quién hace burla a uno de tus hijos es otro adulto de la familia, y no su hermano pequeño. Como se trata de un adulto, lo normal no suele ser pegarle un cachete, suele ser dialogar, discutir, o callarse y no decir nada, o reirle la gracia, que también se da el caso. En ese caso, y sobre todo si el hermano pequeño ha visto el detalle, una cosa le quedará muy clara: su progenitor ejerce la fuerza sobre él porque es pequeño y más débil, pero en cambio, y por la misma falta, no ejerce la fuerza sobre el adulto, porque está en igualdad de condiciones. Por favor, comportémonos con los niños en igualdad de condiciones. Respetémosles tanto como respetamos a los adultos.
Algo que también suelo observar cuando surgen este tipo de conversaciones, es que las personas defensoras del cachete, consideran que sólo ellas están cualificadas para decidir en que momento el niño lo merece. Es decir, no permitirían por ejemplo que el profesor a cuyo cargo están sus hijos en el colegio les diese una bofetada puntual. O si tienen contratada a una persona para que se haga cargo de sus hijos en su ausencia, por ejemplo mientras ellos están trabajando, tampoco le permitirían darle un cachete. Les exigirían que utilizasen otros recursos para solventar la situación (claro, quién sabe, quién me dice a mí que de verdad el niño se merecía una torta, quién me dice a mí que el profesor o cuidador del niño no había tenido un problema y estaba descargando su frustración en mi hijo). Entonces, si otras personas a cargo de mi hijo deben utilizar otros recursos ¿es que yo valgo menos que ellos, es que yo estoy peor cualificado que ellos para educar a mi propio hijo, es que yo no tengo recursos suficientes para educar a mis hijos que necesito utilizar la bofetada que a ellos no les permito?
Y esto ya es mi opinión personal. Cuando un adulto se hace entender con un niño a través de la fuerza (yo soy mas fuerte, tú te sometes) creo que siempre queda un poso, y cuando sea adulto, o bien someterá a su vez a otras personas más débiles, o bien se mostrará sumiso ante los más fuertes (sea en relaciones de pareja, de trabajo, de amistad…).
Y sí, yo creo que una bofetada en casos puntuales es maltrato. Si mi marido me diese una bofetada puntual, como recurso en una discusión en la que no conseguimos ponernos de acuerdo, me estaría maltratando…
Por si a alguien le sirve y quiere practicarlo, mi marido y yo últimamente solemos hacer un ejercicio interesante. Contabilizamos cada acción por parte de un adulto, que en el caso de ser realizada por un niño, merecería una bofetada en opinión de algunas personas (faltas de respeto, saltarse normas sociales, decir palabrotas…..) Es asombrosa la cantidad de bofetadas que podríamos repartir a lo largo de cada día.
A veces es necesario meterse en los zapatos de un niño, aunque nos aprieten un poco…
Mónica, si quedaba lugar a alguna duda, tras leer tus comentarios tal duda ya no puede existir.
Gracias por tus aportaciones a este artículo, las considero excelentes.
Saludos.
*Hola!*
yo tengo 16 años y llegue a aquí y ley las cosas que están aquí y sentí que tal vez hacia falta la mirada de alguien algo mas cercano al tema.
yo recuerdo que cuando estaba en el jardín infantil y tenia 3 años los profesores siempre decían que me comportara como un bebe porque yo ya no los era, porque yo ya no tenia 2 años, al año siguiente me decían lo mismo y hice hasta 3°medio, que es donde estoy ahora. la mayoría de los adultos no se da el tiempo de explicar que es lo que esta mal y lo que hace es decir al niño que debe cambiar porque el lo dice, porque el es mas grande y tiene mas experiencia. que sea mayor, que tenga mas experiencia, que haya vivido mas, no quiere decir que su forma de pensar o actuar sea correcta, ya que que haya vivido mucho no quiere decir que sus experiencias sean “buenas”. eso mismo pasa con los padres que le pegan a sus hijos, que lo hacen solo para que sus no los molesten, ya que seria mucho mas efectivo sentarse con su hijo y plantearle el problema y decirle que debe cambiar, claro que esto no sirve si el niño tiene 3 años, en este caso de debería hacer lo mismo y ademas castigarlo con algo que al niño le guste o también deben existir otros métodos que en este momento no se me ocurren y por tiempo no escribiré.
Mi situación con mis padres no es la mejor y esto no es por la culpa de uno solo de nosotros. el problema es que yo los trato a ellos como a cualquier persona, por ejemplo, si yo creo que algo es incorrecto y digo que creo que esta mal y trato de resolver el problema, pero si yo hago esto con mis padres lo que pasa es que ellos me dicen que yo no los debo contradecir y que
los debo obedecer por que ellos saben mas y que solo soy un niño, que no he vivido nada y que no se nada de la vida. que yo tenga 30 años menos que ellos no quiere decir que yo sea menos que ellos ni que lo que yo diga siempre sea incorrecto, ni que ellos siempre estén en lo correcto, un niño de 3 años puede ser mucho mas inteligente que un niño de 90 años la edad no tiene nada que ver, claro que influye mucho, y siempre existen excepciones, por eso nunca se debe despreciar a nadie.
otro ejemplo es lo que pasa con mi papa, mi hermano, mi mama, el jefe de mi papa y yo. si mi papa me grita yo le respondo si el me hace algo yo le respondo. tomando el principio de que todos son iguales, si el me grita el me esta dejando gritarle, si el me insulta el me esta dejando insultarlo.
ahora pondré algo que pasa siempre en mi familia:
_mi papa me grita
yo le respondo
mi papa me amenaza con pegarme
yo le digo que si el me trata de pegar yo llamo a los policías
mi mama me dice que me calle y que lo deje hablar
yo continuo respondiéndole a mi papa
mi mama me dice que aprenda de mi hermano que siempre que le hacen algo se queda callado y según mi mama eso es ser inteligente por que asi consigue todo._
el jefe de mi papa siempre lo llama cuando el quiere para ir a trabajar, le grita, lo insulta y mi padre lo único que hace es aguantar la rabia y cuando llega a la casa lo único que hace es es quejarse de como lo tratan injustamente y no ve que el hace lo mismo. el tal vez no dice nada a su jefe por miedo de que lo despidan y debe mantener a una familia algo grande y con un sueldo no muy alto, y eso es comprensible pero no bueno, si fuese yo tal vez haría lo mismo(de quedarme callado y no decirle nada a mi jefe) pero al saber que me están haciendo algo malo no lo repitieria con personas que no tienen la culpa, por el contrario haría lo posible por que esto no se repitiera en ningún lugar. el problema es que cuando a mi me hacen algo yo respondo y mis padres me dicen que lo mejor es quedarse callados pero yo no puedo y les digo que sea como mi papa que se queda callado siempre y por eso esta donde esta.
ya me canse de escribir y ademas debo salir por eso adiós
pd:en realidad no creo que nadie lea esto por que la ultima persona que escribió aquí lo hizo en junio pero no importa, ya que si yo escribí esto no fue solo para que mi opinión se diera a conocer sino que también por que debía escribir algo porque sentía mucha pena y escribir siempre me alivia
otra vez adiós y hay nos leemos:D
vamos a ver
yo tengo un niño de 4 años que es muy listo y sabe perfectamente que el no quiere hacer caso, incluso el me lo dice, yo no te hago caso porque no quiero.y yo le digo pues yo te hago caso en todo,cuando me pides juguetes, golosinas, te los doy todo. porque tu entonces no me haces caso?y el niño me dice tu no mandas en mi,mando yo en ti,lo castigo y dice que no se va porque no quiere,y se me van los nervios y luego me arrepiento de haberle dado una bofetada.pero dice ,me da igual.y el me pega a mi.y hasta que no me ve llorar no para.y la pequeña de dos años ve a su hermano y hace lo mismo que el. que hago yo haber?