No todas las personas han muerto accidentalmente, muchas de ellas murieron debido a la imprudencia o negligencia de otras personas, de la DGT o del gobierno español; ésto no es accidental, es delito.
Estamos acostumbrados a escuchar “… muertos por accidentes de tráfico …”. Seamos claros, ¿cuántas de esas personas murieron de forma accidental y cuántas por causas delictivas?.
Los medios de comunicación no hacen hincapié en la causa de las muertes en carretera, se limitan a dar una cifra global. Además, nos muestran imágenes de los atascos en autopistas y autovías, cuando el 75% de los “accidentes” se producen en carreteras secundarias que sólo cuentan con una via para cada sentido.
Respecto a las causas de esos accidentes y delitos sólo mencionan el exceso de velocidad y la conducción bajos los efectos del alcohol, pero hay más causas:
- Mala señalización.
Cualquier persona que conduzca en España se ha percatado de esto, ¿por qué no los distintos gobiernos que hasta ahora hemos “sufrido”? - Mal estado de las carreteras.
Algunas carreteras secundarias es encuentran en un estado deplorable, incluso aunque hubiesen sido arregladas durante los años anteriores. Hay que hacer un seguimiento de las mismas. - Legislación insuficiente.
Si matas a una persona, eres detenido y te retiran el arma. En cambio, si conduces ebrio, sin carné o ambos, y matas a un viandante o a los ocupantes de otro vehículo, eres detenido. Tomado declaración y vuelves a casa con tu coche. Si aplicásemos lo segundo a lo primero un asesino podría argumentar “fue un accidente, yo hice varios disparos hacia el cielo y ¡, no sé como, algunos de ellos entraron en el cuerpo de la víctima”; ¿A qué suena disparatado?. - Medidas de prevención escasas e incorrectas en su mayoría.
Mientras otros países sitúan los radares en carreteras secundarias, en España se sitúan en autovías y autopistas. - Incorrecta iluminación de entradas a ciudades y pueblos.
La excesiva de iluminación en las entradas de las ciudades provoca que la pupila del ojo humano tenga que adaptarse repentinamente, durante ese tiempo no se divisa bien la carretera y aumenta el riesgo de perder el control del vehículo.
Por tanto, en el delito no sólo es cometido por conductores, también por irresponsabilidades de la
DGT o el Gobierno, sin embargo ésto no siempre se menciona, eso sí, se habla mucho de carné por puntos que se implantará próximamente.
Desde la DGT se insiste en que la ciudadanía debe sensibilizarse acerca del peligro una conducción imprudente. Qué tal si ustedes sensibilizan a los responsables del ministerio de interior y de Justicia para que tomen las medidas adecuadas. Al mismo tiempo sensibilizan a los medio de comunicación para que hagan un uso correcto del lenguaje y distingan entre accidente y delito.
Por último, que sucede con las personas heridas, hace unos años se mencionaban en esas cifras globales, ahora ni eso. Entre el “Principio de Peter“ que sufre la DGT y la guerra por las audiencias que son el objetivo de los medios de comunicación, parece que no se enteran de lo obvio: los muertos no sufren, son las personas vivas, ya sean amistades o familiares de las muertas o las víctimas que sufrieron heridas leves o graves.
Acerca de Cecilio Sánchez «Cean»Dicen que hago periodismo y que soy activista social. Retransmito en directo luchas sociales en
Periscope, denuncio injusticias y defiendo diariamente los Derechos Humanos. Desde Murcia (España) para todo el mundo y las 24 horas del día en
ceciliocean.es.
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Sin menoscabar lo expuesto aquí, yo creo que en su inmensa mayoría la culpa procede de los conductores, que extrapolan al volante su escaso o nulo nivel de civilización. Lo que pasa, es que esa patanería fruto de la Ignorancia, también provoca “accidentes” entre peatones; pero como éstos no conllevan muertes o heridas graves, no salen en los periódicos. Si un piloto de líneas aéreas comete un error mucho menos grave de los que se cometen a diario al volante, no vuelve a pilotar nunca más. Por qué esa condescendencia para los “pilotos de coches”?. Conducir es una tarea que exige un nivel de reflejos y sobre todo de inteligencia que está por encima de mucha mucha gente que tiene licencia. De ahí que los accidentes y los heridos y muertos que hemos de contabilizar cada día sea casi una consecuencia lógica de ello.
La verdad es que resulta difícil hacer un juicio justo, puesto que se juntan muchas de las cosas que dices en cuanto a estado de las carreteras, señalización, etc. más la información incompleta que nos ofrecen los medios de comunicación, más las negligencias de los conductores.
Creo que pocas veces sabremos las verdaderas causas de la mayoría de los accidentes. Ahora bien, una cosa creo que es verdad:
Sabiendo que el estado de las carreteras es muchas veces deficiente, que hay mala señalización en algunos casos (más bien poco creíble, pero esto da para otro artículo), y una larga lista de etcéteras, ¿porqué los conductores no tienen en cuenta todos estos factores, sumados a las limitaciones de ellos mismos y a las de sus respectivos vehículos?
Llevo al volante cerca de 17 años y hasta ahora, no he tenido percances de importancia y, puedo decir (aunque resulte obvio) que lo estoy contando. ¿El secreto? En realidad hay varios:
1.- No marco hora de llegada a ningún sitio. Para mí es más importante perder un minuto en la vida que la vida en un minuto.
2.- Extremo las precauciones, especialmente cuando la carretera no está en buen estado y/o mal señalizada, mal tiempo, etc.
3.- Procuro tener el coche en el mejor estado posible, especialmente en lo referente a seguridad (revisiones, dirección, frenos, neumáticos, alumbrado, etc.)
4.- Procuro tener en cuenta las limitaciones mías y las del vehículo. Por ejemplo, en trayectos más largos, hago las paradas necesarias (que no necesariamente “reglamentarias”) para estar bien y conducir cómodamente. Si a los 100 Km. estoy cansado, paro.
5.- Respeto la señalización y los límites de velocidad (aquí cambié un poco “el chip”: en lugar de hacerlo por las multas, lo hago por seguridad). También respeto la distancia de seguridad. Esto me evita frenadas bruscas y, por lo tanto, que el de atrás entre hasta la cocina. Procuro señalizar todas y cada una de las maniobras que realizo con el coche.
6.- Soy usuario del cinturón de seguridad. Quien quiera ir en mi coche, ya sabe cuáles son las normas y si no quiere respetarlas, que se baje. En mi coche soy yo el que manda.
7.- Me paso por el forro de los cojones si me pitan porque no voy a la velocidad que ellos quieren (en resumen, procuro no alterarme con los impacientes).
8.- También me quité la idea de la cabeza que la virilidad se mide por los CV del coche y por la velocidad a la que se pueden hacer los trayectos y por el número de exabruptos que se puede soltar por minuto en un atasco creyendo que la culpa es siempre de los demás.
¿Esto me libra por completo de sufrir un accidente?: NO, pero las posibilidades se reducen significativamente y una conducción tranquila me permite tener mayor control sobre el vehículo y sobre lo que pasa fuera de él. No es imposible que me ocurra, pero es bastante más difícil que para muchos que se ven por las carreteras.
Creo que la responsabilidad es un poco de todos, también del gobierno.
Es de todos sabido que un coche puede ser un arma perfecta para matar ó para matarse. Ahora sólo es cuestión de tenerlo en cuenta en cada trayecto, por corto que sea y por muchas veces que lo hayamos hecho.
No se trata de presumir de nada. Se trata de conducir y de contarlo, en la medida de lo posible.
Estoy de acuerdo con vosotros, la responsabilidad mayor está en la persona que conduce caca vehículo. Esto lo demuestra que cuando el seguimiento policial aumenta los accidentes y delitos dismiuyen.
Está claro: “para las personas entre su seguridad y el dinero, lo segundo es lo primero”. Ni se persigue las impdrudencias y corrupciones políticas a este respecto ni a los delincuentes que matan utilizando su vehículo o el de otra persona.
El mensaje principal que prentendía transmitir es que la palabra "accidente" nos hace sentir que no somos responsables de lo que hacemos al volante, mientras que la palabra "delito" provoca malestar en las personas que comenten imprudencias de frma consciente o que ponen en riesgo su vida y la de las demás personas
Saludos a ambos.
Me gusta llamar a cada cosa por su nombre, aunque no suene bien. El uso de un vehículo conlleva responsabilidad civil. Con independencia de esto, cuando una persona hace conscientemente algo que atenta contra la vida propia y la de los demás, hablamos de un delincuente homicida y, sobre sus actos, hablamos de un delito que puede ir del intento reiterado de homicidio hasta la consumación del homicidio (cuando ya hay víctimas) y aquí no encaja la palabra accidente. Suena mejor, pero no da a lugar.
Creo que aún no se han puesto lo suficientemente serios con el tema. Es cierto que en ocasiones abusan de autoridad, cosa que desapruebo totalmente, pero creo también que contra los negligentes y sobre todo los reincidentes, tendrían que ser más duros.
Las consecuencias de la falta de dureza las acabamos pagando los demás con una mayor inseguridad en las carreteras, un mayor precio en los seguros del coche y también, dicho sea de paso, con unas sanciones irracionales en otros muchos casos que no suponen un peligro para nadie (sirva de ejemplo algunas multas por aparcamiento y cosas así).
Si solamente se tolerara conducir a aquellas personas realmente preparadas para ello, se venderían poquísimos coches y he ahí donde “con la iglesia hemos topado”. Todos los que conducimos la hemos pifiado alguna que otra vez aunque sea de forma leve (errar es humano), si nos quitaran el carnet por cada una de esas pequeñas pifias, las calles estarían desiertas. Ahora bien, a los capullos que van con su 306 tuneado a 110 por centros urbanos, esas no son pifias, y esos sí deberían estar excluidos de toda posbilidad de poseer licencia ni siquiera vehículo rodado.
La legislación al respecto es inadecuada para la realidad actual. Las asociadiones de automovilistas están sugeriendo una serie de normas que son obvias para cualquier conductor sensato pero el gobieno hace caso omiso de ello.
Como dije anteriormente, a las personas les duele más una multa que una herida física y/o psicológica, incluso, más que su propia muerte o la de otras personas. Si quieren sensibilizar, no lo tienen muy complicado.
Estoy de acuerdo con vosotros. Y también es cierto que todo es un inmenso negocio, de ahí que se omitan el seguimiento de la aplicación de muhas leyes e, incluso, de la propia creación de éstas.
Por último, insisto que los medios de comunicación deberían incluir la palabra “delito” en su libro de estilo a la hora de hablar de muertes humanas en la carretera.
Estoy de acuerdo con Cean, la mayor responsabilidad está en los conductores, y aun siendo verdad, creo que muchas veces se utiliza eso para “escurrir el bulto”. Aprovechando que la mayoría de la gente no maneja la lógica adecuadamente y piensa que basta con encontrar una determinada causa para un efecto, cuando la realidad es que casi siempre son varias causas que se juntan para producir el efecto.
No hay que pasar por alto la responsabilidad de otros actores, como las administraciones públicas y empresas encargadas de los mantenimientos etc.
Si conducir en sentido contrario y matar a alguien se castiga como “homicidio involuntario” (no sé si es esta exactamente la figura jurídica, pero espero hacerme entender), el que existan esos puntos negros conocidos en los que de vez en cuando muere alguien y nadie haga nada por evitarlo, también debería ser un “homicidio involuntario”.
El que existan autopistas de peaje caras que obligan a muchos conductores a jugarse la vida en una carretera secundaria paralela también debería considerarse homicidio involuntario.
Por último, el que en las vías rápidas internas de las ciudades se pongan señales de 50 que nadie respeta (en primer lugar porque es peligroso ir sólo a 50 por según qué sitios por el riesgo de que te den por detrás), quizá no sea un “homicidio involuntario” directamente. Pero como el dinero de esas señales podría destinarse quizá a otras cosas como salvar vidas en el tercer mundo, indirectamente también es un “homicidio involuntario”.
Diego, admito que hay otros responsables, distintos de los conductores, que deberían hacer algunas cosas de las que dices y posiblemente muchas más cosas, pero eso no es justificación para que los conductores conduzcan de forma temeraria. Respecto al tercer mundo, pienso que hay mejores cosas de donde se podrían ahorrar muchísimo más dinero para destinárselo a esas personas: armamento, determinadas investigaciones absurdas, ...
Entiendo Jesús que lo del Tercer Mundo que comenta Diego es sólo un ejemplo.
Para explicar la diferencia entre accidente y delito, aquí otro ejemplo:
El 3 de Junio de 2003, dos trenes colisionaron en Chinchilla (Albacete, España), murieron 19 personas. Pues bien, sólo hay un acusado: el jefe de circulación de la estación ferroviaria.
Según Renfe, se deduce que la vida las personas que utilizan el tren depende de la acción de una sóla persona. ¿Realmente a quién se crea tal argumento?.
Pues bien, el fiscal pide dos años y medio de prisión y cinco de inhabilitación para el único acusado, mientras tanto Renfe no ha modificado las medidas de seguridad de esa estación.
Otro ejemplo. El edificio Windsor de Madrid ardío completamente durante la noche del 12 de febrero de 2005. Pues bien, se pretendía acusar a una persona que estuvo en él hasta pocos minutos antes del incendio porque fumó varios cigarrillos y uno de ellos fue el desencadenante del incendio. El juez ha archivado el caso al no hallar responsabilidad penal en el incendio.
Si bien podríamos estar muchas vagas horas discutiendo estos ejemplos, sólo quiero aclarar que el artículo menciono la diferencia entre accidente y delito. La situación en las carreteras españolas da para varios artículos.
Efectivamente Jesús, ni los temerarios justifican el mal estado de la carretera ni viceversa… múltiples causas que confluyen y hay que combatir todas. Lo de las señales de 50 era una ironía :-)
De todas formas volviendo al tema, quizá accidente o delito no sea una cuestión excluyente. Hay accidentes que no son delito, accidentes que son delito, y delitos que no son accidentes. Que el Estado no arregle un punto negro es delito, pero no un accidente. Que un temerario se choque a 200 es delito y accidente.
nosotros como mujers nos entendemos porque para todo somos culpables yase que bienen con problemas del trabajo y se desquitan con la primera que encuentren o asta con su propios hijos yo e sufrido maltrato sicologico y ficico yo tuve que ir huyendo a los estados unido porque ya no aguantaba a mi pareja no se si ya estaba loca o era porque me lo repetia todo el dia el dia que me fui tube que hacerlo sola deje a MIS TRE PEQUEÑOS MI PAREJA ES DE LOS LICENCIADOS MAS RECONOCIDOS EN ESTA CIUDAD UN DIA QUE ME ESTABA GOLPEANDO MI NIÑA LE ABLO A LA POLICIA ES INCREIBLE Y VERGONZOZO ME SACARON A MI CON MIS PEQUEÑOS YO SOY SOLA NO TENGO A NADIE PERO SIGO LUCHANDO POR QUE ME QIERO Y QUIERO A MIS HIJOS